ALEMANIA, AÑO CERO (Germania, anno zero)
(It-Al) Tevere Films / Sadfilm, 1947. 75 min. BN.
Pr: Roberto Rossellini y Alfredo Guarini. G: Roberto Rossellini, Carlo Lizzani y Max Kolpet, basado en un argumento de Rossellini. Ft: Robert Juillard. Mt: Eraldo da Roma. DA: Roberto Filippone. Ms: Renzo rosellini. Dr: Roberto Rossellini.
Int: Edmund Moeschke, Franz Kruger, Barbara Hintz, Werner Pittschau, Eric Gühne, Alexandra Manys, Baby Reekvell, Hans Sange, Hedi Blankner.
Edmund, un niño berlinés inmerso en un escenario sin asideros |
SINOPSIS: Tras el final de la II Guerra Mundial, Berlín era una ciudad caótica y destruida. En ese escenario desolador vive Edmund, un niño de catorce años que comparte un miserable apartamento con su padre enfermo, su hermano mayor y su hermana que coquetea con los soldados americanos para poder sacarles algo que cambiar por comida. El antiguo profesor de Edmund, un pederasta con ideología nazi, le repite que “los débiles deben morir”, lo que terminará por convencer al pequeño de la inutilidad de su padre, y es por ello que decide envenenarlo.
El rostro vaciado de emociones del pequeño Edmund, junto al abuelo |
COMENTARIO: Rossellini aplicó aquí los principios del neorrealismo de la manera más desnuda y terrible, más objetiva, sin ninguna apoyatura melodramática que explique o subraye la trayectoria fatal del muchacho protagonista. Porque Edmund, consumido (o desecado) como niño por la terrible realidad que le rodea, es observado siempre con el “distanciamiento” de quien, por respeto, desecha la intromisión y el adjetivo, evitando caer en la tentación de aplicar a su trayectoria los mecanismos y trucos de la narrativa tradicional. Pocas veces, creo yo, el horror ha tenido una formulación visual tan honrada y contundente como en esta imprescindible obra maestra.
Teo, qué pena me da esta peli, el final es terrible, la incluí en pelicuario hace unos meses porque ha sido una de las que me marcó, quizá con el tiempo se vaya desvaneciendo la sensación que me produjo la primera vez, pero me impactó muchísimo.
ResponderEliminarBesos.
Hola, Teo. No he visto esta película, he visto poco cibe de Rosellini, lo reconozco. Pero he visto que nombrabas El fantasma y la Sra Muir y ya estoy impaciente por ver esa entrada. Es una de mis película preferidas.
ResponderEliminarEspero tu comentario sobre ella con mucha ilusión.
Un beso
Hola, Isabel:
ResponderEliminarSí, estoy contigo en que las imágenes de esta película causan un impacto duradero. Es difícil reponerse del desolador deambular de ese niño entre los escombros arquitectónicos y morales de una Alemania destruida en la que sobreviven a duras penas seres miserabilizados que no tienen redención ni la esperan. Sí, efectivamente, ese (lógico) desenlace es de una dureza insoportable y como espectadores pasivos de nuestra propia degradación, nos golpea en las sienes.
Pero, bueno, después de ver o revisar "ALEMANIA, AÑO CERO" es recomendable un antídoto (también cinematográfico) como, por ejemplo, una peli de Frank Capra.
Un abrazo.
Muy buena película, Teo. Impactante, pero necesaria. Es casi como un documental, al estar rodada en escenarios naturales y así pueden apreciarse los efectos devastadores de la guerra; sus consecuencias sobre la población, que se ve obligada a sobrevivir a cualquier precio y la falta de escrúpulos de aquellos que más tienen y se aprovechan de la necesidad de los demás, para hacer negocio.
ResponderEliminarEn medio de todo esto, Edmund se nos presenta con la inocencia y la ingenuidad propia de sus pocos años, pero al que todos utilizan de una u otra forma, para luego rechazarlo llamándole monstruo (es el caso de su antiguo profesor, pederasta y nazi)
A medida que se acerca el final, mientras le vemos como intenta recuperar la niñez que le corresponde sin conseguirlo,intuimos lo que va a suceder, cuando él se cubre la cara con las manos, como si en un sólo instante hubiera tomado conciencia de todo y ese peso fuera insoportable para él.
He leido que Rossellini, solía utilizar como actores, gente no profesional del cine. En el caso de Edmund, creo que era un artista de circo.
Bueno, disculpa si esta vez me he extendido demasiado; pero la película lo merece.
Un abrazo
Veo, Myra, que sin haber visto "ALEMANIA, AÑO CERO", ya te curas en salud recordándome que había prometido incluir en el creciente engarce de "perlas" "EL FANTASMA Y LA SRA. MUIR" que siendo una gran e inolvidable película, está en las antípodas de la de Rossellini. Pues nada, eso será enseguida porque también es una de mis grandes favoritas y como aountaba en el comentario anterior, todos necesitamos de vez en cuando antídotos contra la prosaica dureza de la realidad.
ResponderEliminarMientras, un abrazo.
Hola, Selegna:
ResponderEliminarMientras respondía a Myra ha entrado tu comentario que puede ser todo lo extenso que tú desees o necesites (faltaría más!) y que en este caso suscribo íntegramente. Y sí, Rossellini gustaba de utilizar siempre que podía actores (o actrices) no profesionales, pero no le hacía ascos a trabajar con grandes estrellas del cine italiano como Anna Magnani, Aldo Fabrizi, Vittorio de Sica, Giovanna Ralli, Sandra Milo, Vittorio Gassman, etc.
Un abrazo.
Puede que esta película la hiciera el padre del neorrealismo, pero creo fue más allá de lo que aquel tipo de cine significó como acta cinematográfica de la miseria en la Italia de la posguerra. Creo que el mensaje, si lo queremos llamar así, de "Alemania año cero" trasciende esa meta y nos golpea a todos. A mí la fuerza de ese golpe me dejó sin respiración.
ResponderEliminarPara terminar, la edición en dvd que tengo de esta película deja bastante que desear en cuanto a calidad de imagen y sonido y me gustaría saber si existe alguna otra edición en mejores condiciones.
Gracias y un saludo para todos.
Hola, Aurora:
ResponderEliminarTienes razón en lo que dices. Para empezar, en esta ocasión el escenario y los personajes son alemanes y no italianos, aunque el método narrativo esté hermanado de una manera bastante clara con el cine neorrealista. En cuanto a lo del alcance de las imágenes de la película que comentamos, de su puesta en escena, creo que estamos de acuerdo en que, efectivamente, nos deja noqueados como la onda expansiva de una explosión cercana. A veces, la honradez narrativa, sin música ni aditamentos "melo", puede tener efectos devastadores. A este respecto, conviene comparar "EL LIMPIABOTAS" con "LADRÓN DE BICICLETAS", ambas de De Sica, para ver el resultado a favor de la primera.
Y ahora intentando responder a esa queja tuya sobre la baja calidad de la edición en DVD, a la que por cierto le faltan algunos minutos, supongo que es la misma que adquirí hace unos años y que la editora (VellaVision) volvió a reeditar algún tiempo después.
Es lamentable que hasta este momento, por lo que sé, no se hayan preocupado por localizar negativos, internegativos o alguna buena copia si existiese en algún lugar y a partir de ahí restaurar esta fundamental obra maestra del cine. Aunque sospecho que las dificultades de su rodaje marcado por las malas condiciones a veces, y los posteriores avatares que sufrió "ALEMANIA, AÑO CERO", hagan difícil localizar buenos materiales. Pero podría intentarse, digo. La película lo merece.
Un abrazo.