10 de octubre de 2013

LA COMUNIDAD
(Esp) Lolafilms / Antena 3 / Vía Digital, 1999-2000. 106 min. Color. Panavision.
Pr: Andrés Vicente Gómez. G: Jorge Guerricaecheverría y Alex de la Iglesia. Ft: Kiko de la Rica. Mt: Alejandro Lázaro. DA: José Luis Arrizabalaga y Arturo García “Biaffra”. Vest: Paco Delgado. EE visuales: Félix Berges-Daiquiri. Ms: Roque Baños. Dr: Alex de la Iglesia.
Int: Carmen Maura, Eduardo Antuña, María Asquerino, Jesús Bonilla, Marta Fernández-Muro, Paca Gabaldón, Ane Gabarain, Sancho Gracia, Emilio Gutiérrez Caba, Kiti Manver, Terele Pávez, Manuel Tejada, Roberto Perdomo, Eduardo Gómez, Antonio de la Torre, Luis Tosar, Enrique Villén, Ramón Barea, Borja Elgea, Aitor Mazo, Rodolfo Sancho, Mariví Bilbao, Silvia Casanova, Andrés de la Cruz.
Julia (Carmen Maura) es una agente inmobiliaria con mucha iniciativa.
Ricardo (Jesús Bonilla), su compañero sentimental, es un tipo vulgar, con escasa personalidad y que no ve más allá de sus narices.
El piso que intenta vender forma parte de un viejo edificio en el centro de Madrid.
Nuestra intrépida Julia, inspeccionando los recovecos del edificio, está a punto de toparse con algo muy desagradable y a la vez muy remunerador.
Encarna (María Asquerino), Paquita (Marta Fernández Muro), Chueca (Manuel Tejada), Hortensia (Paca Gabaldón) y Charly (Eduardo Antuña) son algunos de los inquietantes vecinos del inmueble.
SINOPSIS: Una intrépida agente inmobiliaria, tratando de vender uno de los pisos de un vetusto edificio del centro de Madrid, descubre una fortuna en el apartamento de encima, cuyo anciano propietario permanecía muerto en su interior. Cuando los vecinos del inmueble, que pensaban apoderarse de ese dinero, comprenden que la vendedora se les ha adelantado en el hallazgo, harán todo lo posible para impedirle salir del edificio y buscarán la manera de arrebatarla el botín.
Encarna y Paquita, siempre juntas, siempre vigilantes de los movimientos de Julia.
Castro (Sancho Gracia) y Ramona (Terele Pávez), dos de los belicosos vecinos dispuestos a todo para no dejarse arrebatar el "tesoro" del edificio por la intrusa Julia.
La llegada de Emilio (Emilio Gutiérrez Caba), el administrador de la finca, complicará mucho los planes de Julia para escapar con el botín.
No sólo eso. Al no avenirse a razones con el tenaz administrador, éste intentará asesinarla.
Los acontecimientos se precipitan y Julia intentará a la desesperada huir del edificio con su valiosa maleta perseguida de manera implacable por la horda de vecinos.
COMENTARIO: En sus cinco largos realizados hasta la fecha del estreno de la película que nos ocupa, Alex de la Iglesia demostró saber rodar con la brillantez, el desparpajo y la capacidad técnica de aquellos creadores de imágenes y emociones (hoy ya sustituidos por efectistas videocliperos) que hicieron del cine la más estimulante sesión de magia. Magia, sí, pero en el caso de Alex de la Iglesia ejecutada con una chistera de la que no salen conejos blancos sino monstruos cotidianos, intencionadas caricaturas en clave esperpéntica de individuos que usted y yo conocemos. Porque a poco que nos frotemos los asombrados ojos tal vez descubramos en las animadas viñetas de “EL DÍA DE LA BESTIA”, “MUERTOS DE RISA” o “LA COMU­NIDAD” a alguien con un inquietante parecido a nosotros mismos, parásitos protestones, activistas de la hostilidad, profesionales de la desconfianza, cofrades de la codicia y egoistas incorregibles, integrantes todos de una so­ciedad enferma terminal.
Si las raíces de De la Iglesia (que reconoce y confiesa no haber inventado nada) se hunden en el comic, no son menos evidentes las influencias y enseñanzas –asimiladas con provecho y muy bien conjugadas pese a su disparidad– que el autor de “PERDITA DURANGO” despliega en sus trabajos. Así, centrándonos en “LA COMUNI­DAD”, tenemos en primer lugar las inevitables referencias a Hitchcock (aquel sí que lo inventó casi todo) ya desde los “vertiginosos” títulos de crédito a lo Saul Bass, pasando por algunas secuencias de minucioso diseño y estirado desarrollo donde el tiempo es dilatado para crear angustia (como la interminable que muestra el acoso y derribo del administrador a la protagonista), hasta ese virtuosista climax final en los tejados de la madrileña Plaza Canalejas. Observemos al respecto la transgresora inclinación de ambos cineastas a utilizar emblemáticos “monumentos nacionales" para ubicar esas culminantes escenas (la cabeza de la Estatua de la Libertad, las azoteas de San Francisco, las caras de los presidentes esculpidas en el Monte Rushmore, el espectacular anuncio de Schweppes del emblemático Edificio Carrión, las Torres inclinadas Kio, la gigantesca cuádriga que corona el edificio de un conocido Banco de la calle Alcalá).
Pero no sólo de Hitchcock viven los cineastas actuales y ahí tenemos a un desinhibido De la Iglesia, entrando a saco cuando lo cree conveniente en el universo de otros maestros como Polansky (su “vecindad” parece sacada de “LA SEMILLA DEL DIABLO” y “EL QUIMÉRICO INQUILINO”) y, por supuesto, el malévolo e inmisericorde humor que despliega en el dibujo de algunos personajes es pura­mente azconiano-berlanguiano.
De lo expuesto anteriormente podría deducirse que estamos ante una gran obra, pero desafortunadamente no es así porque “LA COMUNIDAD” está aquejada de una saboteadora cojera claramente situada en la estructura de un guión con algunos desequilibrios (diálogos innecesarios, frenazos de ritmo, lagunas) y una irritante colección de incoherencias que afectan al ritmo de la película y a la “verosimilitud” de algunos pasajes (resultan absurdas algunas premisas de las que parte la acción). Claro que ahí están los talentos unidos de Carmen Maura (formidable tour de force) y un plantel de excelentes secundarios que con su fuerza en pantalla suplen las carencias del esquemático boceto a que están reducidos la mayoría de sus personajes. Por ejemplo, podría haberse suprimido esa convención de guión que es el personaje incorporado por Jesús Bonilla y por contra podrían haberse ampliado otros a todas luces necesitados de un mayor desarrollo.

18 comentarios:

  1. A mi este director me encanta, pero esta película no me termina de llenar. Me parece demasiado correcta, aunque como entretenimiento se disfruta de principio a fin, sobre todo por la labor de Maura. Entre las referencia que apuntas, se echan de menos las ibéricas, facilmente identificables, que van desde "13 Rue del Percebe", hasta Berlanga y Azkona.
    Este hombre no ha hecho aun su película perfecta, pero sus obras ferpectas me encantan.
    Saludos

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    1. Creo que "EL DÍA DE LA BESTIA" se acercaba bastante a una "perfección" sin pulir (valga el aparente contrasentido). Una obra casi primeriza -quién lo diría- y sin embargo es la que más me gusta. Me ocurre lo mismo con Peckinpah que para mí nunca logró superar emocionante la belleza y redondez de "DUELO EN LA ALTA SIERRA", su segundo largo.
      En cuanto a las referencias ibéricas en su cine, son evidentes y lo menciono en el comentario, tanto el diseño de comic de sus películas, como la innegable influencia azconiano-berlanguiana en la construcción de los personajes. Y sí, efectivamente, aún estamos esperando esa película PERFECTA del señor De la Iglesia. Llegará, llegará.
      Un saludo.

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  2. Querido Teo, primero decir que me encanta todos los films españoles que recoges, en tu selección veo lo mejor, rescatando también los directores más indispensables de nuestro cine. De Alex de la Iglesia recuerdo sobre todo "El día de la bestia", "Crimen ferpecto", la mejor para mi "Acción Mutante". "La comunidad" tiene cierto aire comercial o convencional, dentro del esquema que siempre caracterizó el cine del vasco. Un cine socarrón y ácido, que muestra el lado más miserable y caricaturesco de la gente. Como bien apuntas todos conocemos a alguien así, un vecino chiflado, o gente un poco extraña. Solo decir que jamás viviría en esa comunidad, porque miedo sí que dan. Excelente reparto de primera línea, en especial Carmen Maura. Con sus pequeños defectos y lagunas de guión, la parte narrativa y estética para mi excelente. Siempre me alegra que se hable de cine español y más eligiendo estas películas que no tienen nada que envidiar a las de Hollywood.

    Un beso.

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    1. No sólo no tienen nada que envidiar a las de Hollywood, Mar, sino que suelen ser mejores. Hablo, sobre todo, de las que ahora se ruedan en la Meca del cine, basura comestible para espectadores de doce años. Alex de la Iglesia posee una capacidad técnica y una narrativa incisiva y percutante, inclinada hacia el esperpento que convierte las historias que nos cuenta en experiencias alucinógenas debido básicamente a la potencia noqueante de sus imágenes.
      Como ya decía más arriba, "EL DÍA DE LA BESTIA" es el trabajo de De la Iglesia en el que intenciones, pretensiones y resultados casi, casi, alcanzan el pleno. Por eso coincido contigo en mi predilección por este título.
      A diferencia de nuestro nefasto ministro Wert, a mí me interesa mucho el cine español, es muy interesante y variopinto, pero por lo visto casi nadie cree en las pelis hispanas y por lo tanto tienen muy pocos espectadores (salvo hits coyunturales).
      Un besazo, mi cinéfila Mar.

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  3. No soy muy de Alex de la Iglesia, al menos no del último Alex de la Iglesia. Soy de su "El día de la bestia" y de su "La Comunidad", quizás por lo hitchcokniano de la forma más que por el contenido, como has mencionado. Pero esas estructuras a medio terminar y esas lagunas y/o excesos en los guiones, por desgracia lugares comunes en algunos cineastas (el caso de Almodóvar es evidente), dan al traste con muy buenas ideas. Saludos.

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    1. Yo nunca he estado de acuerdo con ese clásico al que casi todos se apuntan de que "con un mal guión no se puede hacer una buena película". Y ahí están algunos títulos de Orson Welles o Douglas Sirk (entre otros) para apoyar mi opinión. Creo que en el caso de De la Iglesia sus guiones, aún partiendo de una buena base, están poco trabajados y a su puesta en escena, poderosa en cualquier caso, le falta un hervor. Se percibe una cierta precipitación tanto en lo escrito como en su filmación. Por otro lado, en tu acertado diagnóstico crítico mencionas precisamente a los dos directores españoles en activo que más me interesan y de los pocos que me catapultan hacia el patio de butacas cada vez que estrenan película.
      Un saludo.

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  4. Mi querido Teo, como dice el comentarista Ethan, no soy mucho de Alex de la Iglesia, quizá sólo " El día de la bestia " y " La comunidad ", volviendo a estar de acuerdo con Ethan, por lo hitchconiano y que me perdone el director inglés, pues ese aspecto nadie puede compararsele. De esta peli, sobre me quedo con el trabajo de los actores, en especial con esa Carmen Maura, a la cual adoro y Terelu Pávez, la similitud que estableces con Polanski y " la semilla del Diablo " o " El quimérico inquilino ", lo siento Teo, no puedo estar de acuerdo, las pelis del polaco, han pasado a ser obras de culto y no sé hasta que punto, los films de Alex de la Iglesia, por mucho que el muchacho quiera, puedan compararse con " La semilla del Diablo ", son los excesos nunca son buenos ....aunque las ideas sean buenas. De todas formas ya sabes, que yo no soy mucho del cine español actual, el otro ví junto a mi madre " Calle Mayor " y me dejo de piedra pómez, es decir me encantó, no sé, si tienes que añadir algo al respecto.

    Un beso mi querido Teo

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    1. De acuerdo contigo, Susan, en lo de "EL DÍA DE LA BESTIA". Como ya escribía en contestación al comentario de Mar Salmerón, es mi película favorita de De la Iglesia. Sin embargo, hay otra que se suele mencionar muy poco y que probablemente sea la más ambiciosa y compleja de su filmografía, me refiero a "PERDITA DURANGO", que me fascina.
      En cuanto a eso de las comparaciones con el cine de Hitch o de Polanski, en ningún momento creo haber equiparado las películas del vasco con las de esos dos maestros. Los menciono en mi comentario porque está claro que los admira y chupa rueda de ellos siempre que puede. Precisamente el autor de "VERTIGO" es el más homenajeado, plagiado y saqueado de la historia del cine. Y ocurre otro tanto con la obra del genio polaco.
      Que hace unos días descubrieras "CALLE MAYOR" junto a tu madre me parece maravilloso pues no se puede pedir mejor compañía para ver por primera vez una película fundamental en la carrera de J.A. Bardem, así como una de las más destacables dentro de la historia del cine español, ese al que tan poca atención le prestas, mi querida Susan. Pocas veces se osó retratar (las cortapisas eran muchas) con tanta precisión la grisácea vida de provincias en la España de Franco, pocas veces la frustración y ausencia de expectativas fueron plasmadas con imágenes tan elocuentes. Y además la norteamericana Betsy Blair consiguió una composición asombrosa llena de matices. Ya te contaré en otro momento su heroico comportamiento durante el difícil rodaje de aquella película. Felicidades a las dos, madre e hija.
      Un beso.

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  5. Hola Teo, esta peli española tiene referencias Hitchconianas, pero por supuesto que no se le parece en nada al maestro inglés. A decir verdad, me pareció más cómica que de suspenso por lo caricaturesco de los personajes (vecinos). El corte abrupto de la desaparición del marido de Julia, que iba y venía, me daba esa sensación que estaba de más, se podría haber evitado. Pero vamos quién soy yo para criticar a un director que no conozco. Así que todo lo que escriba ahora, tómalo con pinzas: La interpretación de Maura me ha gustado mucho, me ha hecho reír en algunos diálogos, una naturalidad muy fresca como por ejemplo cuando se desespera con su "hallazgo" y quiere sacarse de encima a unas potenciales locatarias o compradoras y las "espanta" con el tema de las "tijeras", o cuando intenta esa cena romántica con el marido (que tipejo ese) y se van a la cama y se le caen esas cucarachas horrendas, debo reconoce que me hizo reír. O el tonto o no tanto del voyerista disfrazado (nada tiene que ver con el voyerismo de “La ventana indiscreta”) que terminó siendo bastante más rápido a la hora de quedarse con la “suculenta” maleta, ese personaje ridículo me causó gracia. Eso sí, me resultó tan mala la escena cuando el administrador quiere asesinar a Julia, esa dilatación le quitó sentido, la mataba o no la mataba, “esa es la cuestión” “ser o no ser” asesino y quedarse con las millones de pesetas. Ahí creo que rayaba lo ridículo para tratar el género que tanto le dio Hitch, por eso creo que las comparaciones muy directas serían un disparate. Obviamente que servirse de algo de misterio (al principio, cuando entran a ese departamento donde está el occiso), o cuando Julia escapa por la azotea de ese edificio, tiene apenas un aire Hitch. En fin, la película me hizo pasar un buen momento, porque la vi completa, no me aburrió, pero para mí fueron excesivos algunos parlamentos, sin sentido y para suspenso le veo poco, para algo más cómico rayando lo ridículo le veo mucho, en ese sentido el director cumplió el objetivo (si es que se lo propuso o ni lo buscó) con esos patéticos vecinos, que los hay variopintos, por doquier. Siempre nos podemos cruzar con gente así, pero lo peor es cuando son tus vecinos. Sin ir más lejos (me estoy riendo), pude identificar dentro de los personajes a mi vecina jaaaaaajaa, en este caso digo el pecado, al pecador lo voy a omitir, vamos a darle un "suspenso al estilo Alex" ;) y yo no quiero ser Julia, ya me veo corriendo por las terrazas de mis vecinos jajajaa se me caen los lentes jajajajaa, sería muy fácil quitarme el botín jajajaaja…Besos mi querido chevallier.

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    1. Este director se distingue por una desmesura no exenta de crueldad y de ahí sus inmisericordes y desopilantes caricaturas de la condición humana. Su estilo se nutre en el esperpento ibérico y por supuesto no le importa entrar a saco en el universo de esos dos mencionados maestros. En cualquier caso, una ensalada que en ocasiones alcanza la brillantez.
      Tienes razón cuando criticas la dilatada secuencia entre el administrador y Julia: no acaba de funcionar por su artificiosidad y deficiente diseño. Pero, en todo caso, Alex de la Iglesia es uno de nuestros más capacitados directores, le gusta el espectáculo y sabe cómo servirlo. Cuando trabaje más los guiones y ruede más despacio, seguro que conseguirá su obra maestra.
      En este blog están reseñadas dos películas más de él (por si sientes curiosidad por su cine).
      Un abrazo.

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    2. M. Nogales09 enero, 2014

      Artificialidad... eso es lo que pierde a Álex de la Iglesia (como también a Almodóvar, en mi opinión). Talento desperdiciado en la mayoría de sus películas por ese afán en aferrarse a un universo demasiado particular para resultar creíble o cercano. Creo que la peli tiene un toque tebeo (que no cómic), que la perjudica. Demasiada caricatura, no?

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    3. Creo que ni De la Iglesia ni Almodóvar han querido nunca ser "realistas" en su cine. No obstante, la caricatura es una herramienta o un método para dibujar retratos que describen en clave desorbitada situaciones y personajes -cercanos o lejanos- pero reconocibles. En cuanto al universo propio, en el caso del cineasta manchego, es su mayor virtud y la base de toda su obra. Las películas de Amodóvar sólo remiten a... Almodóvar.

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  6. No la he visto, pero la tendré en cuenta para el futuro. Veo que aunque la encuentras defectos tiene otras virtudes que la hacen redimible.

    Besos

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    1. Algo más que redimible, Maribel. Pese a sus "taras" creo que es una gran película. Cierto que los materiales con los que la ha construido no son precisamente originales pero diría que están manejados y reciclados con virtuosa habilidad (como el cine de Tarantino, por ejemplo).
      Un beso.

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    2. M. Nogales09 enero, 2014

      Álex de la Iglesia tendría que comer muchas espinacas para igualarse a Tarantino (sobre todo escribiendo guiones). Lo que en Quentin es sofisticación, complejidad y solidez en Álex es, simplemente, plof. Según mi humilde opinión, claro.

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    3. Bueno, M. Nogales, no pretendía "homologar" a ambos realizadores pero lo que resulta cierto es que ambos poseen una innegable habilidad para dar valor y nuevo brillo a materiales que de entrada y sobre el papel, espantarían a muchos cinéfilos. En el caso de Tarantino este "talento reciclador" alcanza, por momentos, el virtuosismo de un alquimista: es capaz de convertir el plomo en oro.

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  7. Creo que esta película es un retrato caricaturizado del espíritu vecinal y por extensión, de la condición humana. Aunque en algunos momentos me pareció excesivamente cruel, sufrí y me divertí mucho con ella. Todos los actores están geniales, pero Carmen Maura me dejó boquiabierta.
    Estupendo post, Teo. Besos.

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    1. Lo cierto es que entre las señas de identidad del cine de De la Iglesia, está, qué duda cabe, el retrato inmisericorde de los personajes que habitan suss pelis a los que suele someter a situaciones de extrema degradación. Vamos, que queda claro que el señor Alex no ama a sus criaturas y en ocasiones se regodea en ello.
      Un besazo, Pili.

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