1 de mayo de 2012

LA REINA CRISTINA DE SUECIA (Queen Christina)
(USA) MGM, 1933. 100 min. BN.
Pr: Walter Wanger. G: S.N. Behrman, Salka Viertel y H.M.Harwood, basado en una historia de Salka Viertel y Margaret P. Levino. Ft: William Daniels. Mt: Blanche Sewell. DA: Alexander Toluboff y Edwin B. Willis. Ms: Herbert Stothart. Dr: Rouben Mamoulian.
Int: Greta Garbo, John Gilbert, Ian Keith, Lewis Stone, Elizabeth Young, C. Aubrey Smith, Reginald Owen, Akim Tamiroff, Georges Renavent, David Torrence, Gustav Von Seyffertitz, Ferdinand Munier.
La insatisfacción y la soledad, también las responsabilidades que conlleva su cargo, abruman a la reina Cristina (Greta Garbo)
Cristina ha de soportar el acoso del ambicioso Magnus (Ian Keith), que aspira a compartir el trono de Suecia, pasando por la cama de la reina
Para combatir el aburrimiento, Cristina gusta de disfrazarse de hombre y compartir jarras de vino en una concurrida posada. Quien parece defenderla del rufián de turno, es Antonio (John Gilbert), emisario español de Felipe IV
La voluptuosa camarera de la posada se insinúa a Cristina creyéndola un apuesto doncel, mientras Antonio sonríe, ignorando él también el verdadero sexo de su "compañero" de habitación
SINOPSIS: A mediados del siglo XVII, Cristina, reina de Suecia, tiene verdaderos problemas con sus ministros y consejeros cuando se niega a aceptar una boda de estado con su primo el príncipe Carlos Gustavo, héroe adorado por el pueblo. En una de sus frecuentes escapadas de palacio –disfrazada de hombre– conoce al emisario español de Felipe IV que viaja desde su país con una propuesta de matrimonio de su monarca. Obligados a compartir habitación en una posada, Cristina acaba revelándole su condición de mujer pero le oculta su regia identidad y vivirá con él una loca noche de amor que marcará el futuro de ambos.
Una vez aclarado el equívoco, nace la pasión entre los dos
Al final de la noche, antes que amanezca, Cristina trata de retener sensorialmente todo lo que ha formado parte de esa velada de amor
De regreso a la dura realidad, Cristina y Antonio han de asumir los regios impedimentos que obstaculizan su amor
En la proa de su barco, la reina Cristina, aparentemente vaciada de emociones, deja que la brisa marina azote sus pensamientos mientras transporta el féretro de su amado Antonio
COMENTARIO: En la filmografía de la Garbo abundan películas de discutible calidad, otras realmente buenas y algunas -tal vez tres o cuatro- obras maestras ("MARGARITA GAUTIER", "NINOTCHKA"), pero si tuviéramos que elegir una como la mejor, sin duda nos quedaríamos con "LA REINA CRISTINA DE SUECIA", única ocasión en que "la divina" fue dirigida por el poco estudiado y casi olvidado Rouben Mamoulian.
Al margen de anacronismos y falsedades históricas –que poco o nada importan– se nos cuenta una bellísima historia de amor a través de la inspirada, delicada y atmosférica puesta en escena de un maestro a cuyo talento se unía un espíritu innovador y una buena dosis de audacia en su deseo de transmitir al espectador sensaciones, emociones y pensamientos de sus personajes a través unicamente de la imagen (no olvidemos que Mamoulian fue el realizador en 1929 del seminal "APLAUSO", primer film sonoro –un musical– que experimentaba con la imagen y el montaje para no limitarse a clavar la cámara delante de los actores fotogra­fiando parrafadas, o más tarde, en 1935, responsable también de la película "LA FERIA DE LAS VANIDADES", pionera en la utilización dramática del color).
Estamos hablando de cine “sensorial” y es obligado, en este sentido, referirnos a dos momentos de la película en verdad antológicos que han pasado a la historia con todo merecimien­to: el primero, es la secuencia en que Cristina, tras su noche de amor con el embajador español en la posada, recorre la habita­ción silenciosa y lentamente palpando con sus manos los objetos, paredes, telas, y tratando de grabar en su memoria todo lo que en ella se encuentra, de retener para siempre aquellos momentos y aquel lugar. El segundo, es el plano final de la película que muestra a Cristina en la proa del barco que la lleva a ella y al cadáver de su amado rumbo a España, mientras la cámara se acerca lentamente hasta un primer plano sostenido del rostro "sin expresión" de la Garbo, sobre el que (y esto es lo que deseaba el director) nosotros escribimos el final de la película.

21 comentarios:

  1. No la he visto pero creo que es un papel que a la Garbo le viene como anillo al dedo. La veré.
    Un saludo.

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    1. Los anillos que la Garbo se ponía en los dedos, los moldeaba hasta hacerlos a su medida. Quiero decir que los personajes que llegaban a ella los asumía y desaparecían en su interior para volver a emerger como "lógicas" manifestaciones de sí misma. Los sublimaba, vamos.
      Me haría muy feliz (como cinéfilo) que vieras esta magnífica película lo antes posible. Es una auténtica joya, o a mí me lo parece.
      Un abrazo.

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  2. Para muchos/as la mejor película de "La Divina", que está magnífica, al igual que su "partenaire", la ex-estrella silente John Gilbert. Ciertamente, la pareja desprende una química especial (no sé si el que estuvieran envueltos en un romance años antes en la vida real pudiera influir en ello). Efectivamente, los dos momentos que citas han pasado a la historia del cine y quedan grabados en la memoria del cinéfilo. También el vestuario y los decorados son parte importante del acabado final del filme, al menos para mi. Creo recordar que la película no funcionó muy bien en taquilla en el momento de su estreno. Desde luego que para conocer a la Garbo, actriz por la que la cámara parecía (y parece) sentir fascinación, esta una de las mejores elecciones. Un saludo.

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    1. Esa "química" a la aludes creo que está más en la mente de los espectadores que en la pantalla. Me refiero a que todos sabían entonces, y nosotros también ahora, que Greta Garbo y John Gilbert vivieron un romance, clandestino primero y sonado después (saboteado por Louis B. Mayer), y que fue ella quien lo impuso en la película por compasiva lealtad hacia Gilbert. Sabido es que el actor estaba acabado cuando rodó "QUEEN CHRISTINA" a causa de su mala adaptación al sonoro, tanto en su estilo interpretativo como por su horrible voz. Aún así, la magia existe y la película es una fascinante e imperecedera obra maestra gracias al singular talento de Mamoulian y el "divino" magnetismo de la Garbo. Benditos sean.
      Un saludo.

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    2. Recomiendo el visionado en versión original de esta película para comprobar el "bulo" sobre la voz de Gilbert, una leyenda que como bien dices se encargó de instigar Mayer (probablemente a causa de un "lío de faldas"), o al menos para apreciar como era y hacernos un juicio propio de esta anécdota parodiada en "Cantando bajo la lluvia", por ejemplo. Para mí Gilbert está espléndido y ofrece una buena réplica a La Divina. La "magia" es una manifestación cuasi- palpable cuando estamos con la pareja en la habitación y en lograr esa, como bien apuntas, experiencia sensorial el actor también juega un rol relevante. Aún así, y creo que esto es indiscutible, la película la lleva G.G..Un saludo y benditos sean ellos, Mamoulian y el Cine.

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  3. Qué clasicazo Teo, estupendo resumen y estupenda selección de secuencias...Vi por última vez este película cuando estaba en la facultad, un lunes noche en el programa de Jose Luis Garci "Qué bello es el cine", y ahora tengo unas ganas enormes de revisionarla. Un abrazo.

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    1. Hola, Meg: me alegra que esta (algo apasionada) entrada que he dedicado a "LA REINA CRISTINA DE SUECIA" haya reavivado en ti el deseo de revisar la inmarchitable película de Mamoulian. Si consigues verla pronto, ya me dirás.
      Mientras, un abrazo.

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  4. Yo juraría que te he visto en un frame de esta película, o eras tú, o un tipo clavado a ti que estaba con la Garbo. Ahora hablando en serio, hace tanto tiempo, pues yo creo que fue también el programa de Garci, como dice Meg. A mi también me han entrado ganas de revisala.

    Un abrazo
    Roy

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    1. Acepto estas bromas cronológicas porque en el fondo las inicio yo. Hablando de "QUEEN CHRISTINA", te digo lo mismo que a Meg. Ahora que caigo, existe una edición en DVD que adquirí hace un par de años por lo que sospecho que estará descatalogada. Por otro lado, parece que se han olvidado de esta joya en las cadenas televisivas. En fin, siempre existe la posibilidad de "conseguirla" en la red.
      Un saludo.

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  5. Una película para no perdérsela por nada del mundo. A los dos momentos que mencionas (los mejores, sin duda), añadiría el arranque, con Garbo entrando en el palacio, un plano que tarda una eternidad hasta mostrarnos el rostro de la actriz.
    Bravo por Mamoulian.

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    1. Lo cierto es que esta película está jalonada de momentos inolvidables, de auténticos hallazgos en el lenguaje (clásico) cinematográfico que llegan al espectador, aún ochenta años después de haber sido diseñados y filmados, con inmarcesible frescura y la necesaria dosis de eficacia dramática capaz de emocionarnos.

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  6. Tocas mi fibra sensible al hablar de "La reina Cristina de Suecia", uno de los filmes más emotivos y románticos del Hollywood clásico. Supone el mejor trabajo de Mamoulian, sin duda. Y qué decir de la química entre la Garbo y el dicharachero Gilbert (creo que eran amantes por entonces). En fin, poco que añadir a tu estupendo comentario.
    Un saludo.

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  7. Sobre esa discutible "química" entre la Garbo y el pobre Gilbert creo que hablo algo en la respuesta a uno de los comentarios aportados a esta entrada. Por lo demás, estamos hermanados en la devoción hacia esta maravillosa joya que en su día (y desde entonces) nos ayudó a amar aún más el cine.
    Gracias por tu aportación.
    Un saludo.

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  8. Aurora R. Martín06 mayo, 2012

    A mí esta película de toda la vida me ha fascinado con esa historia de amor tan bien contada, con esos momentos mágicos que mencionáis, y aunque hace ya mucho tiempo que no la he visto, sus imágenes las tengo muy presentes. Pero por lo que alguien ha dicho en los comentarios, yo también soy de la opinión de que John Gilbert en algunos momentos resulta... no sé si atreverme a decir que ridículo con su aspecto y todos esos ademanes de puro cine mudo. En lo de su voz no entro porque la he visto siempre doblada.
    Un saludo.

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    1. Esa impresión negativa en el público causada por el difícil acomodo de Gilbert a las nuevas reglas que imponía el sonido en las películas debió ser generalizada en la época porque el actor (y amante de la Garbo) apenas consiguió trabajar a partir del advenimiento del sonoro. Ciñéndonos a "LA REINA CRISTINA", las críticas sobre él fueron demoledoras. Es posible que en algún caso interviniera la mano negra de Louis B. Mayer que se la tenía jurada.
      Un saludo.

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  9. Hola Teo, ya sabes que por motivos personales estoy descansando del tema blog, pero siendo este film harre una excepción, qué puedo decirte de una de mis pelis favoritas, La Reina Cristina hizo que me enamorará de la Garbo para siempre, ya lo he contado muchas veces, pero volveré hacerlo:
    Cuando tenía 8 años empezaban a proyectarla y ya tenía que estar en la cama, pero junto a mi padre me quede en el sofa viendo el comienzo y ahí es cuando se produjó el milagro o la magía, mi cerebro infantil algo debió captar, y sé cual fue el momento, es cuando a Garbo la enfocán con el sombrero que la tapa la cara y de repente aparece su rostro...ya no me quise ir a la cama y ahí me quede viendo la peli, sin enterarme seguramente de lo que ocurría en el guión, pero era ELLA, lo que me cautivó, su rostro de máscara bellisímo, su mirada, sus andares rapidos, sus gestos con las manos y esa expresión que nunca la abandonaba, veras Teo hay otras niñas que se flipan por Marilyn o actualmente por Audrey, a mi me paso con Greta y desde entonces mi pasión, y veneración por ella siempre ha ido en aumento, he visto todo sus cintas muchas veces y hay algo en ella que me deja como "drogada". Fue una actriz que sacaba lo de dentro afuera, es arte.
    La Reina Cristina la he visto ya de adulta y es una hermosa historia de amor, un film magistralmente dirigido, ese blanco y negro y cada escena compone un lienzo. Mis pelis preferidas de Garbo, son todas, pero si tengo mis favoritas, la primera QUEEN CHRISTINA, seguida de NINOTCHKA y SUSAN LENOX ( por eso escogí el seudónimo) me gusta como suena fuerte y seguro. QUEEN CHRISTINA en una palabra es una obra maestra, toda la cinta lo es, con ese final, creo que Mamoulian, la dijo pon cara de nada y ella
    magistralmente así lo hizo.

    Un beso Teo...nos leemos pronto.

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    1. Gracias, Susan, por ese texto cargado de amor y fascinación hacia las películas de Greta Garbo. Por esa historia (que ya conocía gracias a ti) que se remonta a tu niñez, para "explicar" el momento mágico en que se estableció tu conexión con la divina Garbo, además con la figura paterna condescendiente (con la hora de acostarte) junto a ti, en el sofá. Vamos, como soy muy peliculero, imagino ese momento y ese escenario como en una producción Metro dirigida por George Cukor.
      Como puedes imaginar, todo lo que dices de "QUEEN CHRISTINA" lo suscribo plenamente porque también es una de las películas de mi vida. Hasta pronto.
      Un abrazo.

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    2. Pues Teo, es tal cual te lo imaginas, un papa alucinado una cria con su pijama que no quería acostarse y que le decía: Quiero un disfraz de mosquetero como esta chica tan guapa.
      !!! Qué historia !!!!

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  10. Por cierto las fotos que has subido, fabulosas, ahora mismo las copio y las guardo....Gracias Teo por esta entrada, a ver si te atreves con Susan Lenox, y a los que no la han visto, POR FAVOR !!!!!! YA MISMO LO TENEIS QUE HACER, palabra de Susan Lenox.

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    1. Sí, son fotos muy bonitas, la verdad. Sírvete tú misma. Respecto a "SUSAN LENOX", peli inspiradora de tu evocador seudónimo, puedo revisarla para actualizar mi juicio sobre ella que en su día no fue muy entusiasta. Pero, en fin, tu inclinación por ese título parece que me anima a intentarlo. Lo cierto es que no se sabe muy bien quién dirigió esa película porque la comenzó King Vidor y por diferencias con la diva abandonó el rodaje y según tengo entendido se hizo cargo de ella Robert Z. Leonard, un aplicado esbirro de la Metro (que también hacía las funciones de productor de esa película). Luego, hubo sus más y sus menos con el mal rollo entre Gable y la Garbo que le consideraba muy vulgar... cosas de los rodajes de antaño!

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    2. No sabía de ese mal royo entre Garbo y Gable y sabes lo que te digo, que Garbo tenía razón Gable según mi padre tenía cara de tendero de ultramarinos, jajajajaja.

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